07 de noviembre de 2011
Francisco Javier Félix Belmonte
Cuando se migran máquinas Windows, por alguna razón que desconozco, Windows memoriza con cuál controladora IDE/ATA fue instalado y no permite arrancar en caso de algún cambio de hardware, produciendo el típico pantallazo azul de la muerte. La solución pasa por realizar unos cambios en el registro para aceptar varias controladoras, según la documentación oficial de Microsoft:
👉 https://support.microsoft.com/kb/324764
O bien usar la utilidad MergeIDE, que automatiza el proceso.
Desinstalar las VMware Tools.
Ejecutar en el disco C: la herramienta MergeIDE.
Apagar la máquina virtual.
Convertir la imagen VMware a formato RAW:
qemu-img convert -O raw vmware.vmdk qemu.img
En caso de estar dividida en partes de 2 GB, antes ejecutar:
vmware-vdiskmanager -r vmware.vmdk -t 0 vmware-copy.vmdk
Ejecutar la máquina en KVM e instalar los drivers VirtIO desde:
👉 https://alt.fedoraproject.org/pub/alt/virtio-win/latest/images/bin/
Esto mejorará el rendimiento del sistema virtualizado.